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POBRE MÉXICO…. LINDO Y SUFRIDO…

LA COLUMNA...
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           Por:Immer Sergio Jiménez Alfonzo

Antes se decía que México se jugaba su destino cada seis años con la elección del nuevo Presidente de México, que llegando al cargo le imprimía su propio sello de cómo llevar los trabajos de su propia administración, y conformando a su equipo de trabajo con personalidades que si bien estaban bajo sus órdenes, tenían la alta posibilidad de asesorar y aconsejar al presidente sobre las acciones a seguir, y éste las oía y seguía con modificaciones discutidas en grupo, si bien, imprimiéndole su propia orientación.

Así llegaron buenos y malos gobernantes que hicieron que el país creciera entre un mar de corrupción, nepotismo y raterías del dinero público, pero avanzando y resolviendo muchos problemas sociales y dejando otros o recrudeciéndolos en contra del pueblo, que exigía a gritos reformas sustanciales en diversas materias y reconocimiento de derechos, con marchas, acciones y movilizaciones de muchos grupos sociales, políticos y sindicales, que fueron logrando victorias pírricas o importantes pero logrando unidades de acción verdaderamente multitudinarias, que incidían en una demanda generalizada de cambio de conducción de gobierno y del grupo político dominante.

Y ese anhelado cambio se vislumbró con la contienda por la presidencia que protagonizaron Cuauhtemoc Cárdenas y Vicente Fox, con muestras de apoyo masivo y la esperanza de un vuelco en la forma de concebir las acciones de gobierno a favor del pueblo. Ganó Fox la presidencia, y con sus primeros actos surgió la decepción popular, al acorrientarse la figura presidencial y desatarse la corrupción a una máxima expresión, que siguió con los desaciertos y malos actos de los presidentes Calderón y Peña Nieto que empujaron al abismo a nuestro país.

Pero lo peor llegó vestido de “esperanza” y promesas de gobierno con López Obrador, mismo que durante 18 años en campaña política fustigó a los de la “mafia del poder” de los gobiernos priístas y panistas, prometiendo y alardeando a los 4 vientos que desde su primer día de gobierno todo cambiaría con sus propuestas para lograr que México se pusiera en el primer mundo con lo que estaríamos en la gloria, al combatir la corrupción, mejorar el sistema de salud, crear mejores esquemas de financiamiento y excelsitud en la educación, así como apoyar y mejorar la economía y….lo más cacaraqueado, combatir y acabar con la violencia y la delincuencia organizada.

Pero nada de ello se hizo bien o al menos se intentó, por lo que a 2 años del inicio del gobierno morenista de López Obrador nada de eso ha mejorado, por el contrario, en lugar de combatir los males los ha solapado y acrecentado al gobernar en la improvisación, el desaliento y las ocurrencias, adornadas con mentiras, “otros datos” y la cantaleta de culpar al pasado, como sucede cruelmente con su saltibanquis y nula estrategia de combate al covid 19 con un programa sanitario con muchas deficiencias ya que solo pondera estadísticas y color de semáforo, pero tiene una nula eficiencia de estrategia de combate frontal o tan siquiera preventivo a ese mal viral, que solo hizo más grande la pandemia hasta llegar a más de 200 mil los muertos y la saturación de los centros hospitalarios, para luego con retardo hacer las compras de las vacunas contra ese mal, e imponer un monopolio en la aplicación de ellas con un método o programa improvisado de vacunación que avanza con lentitud y desorden manifiesto, con vacunas insuficientes y sin las atenciones y lugares adecuados, propiciando que los lugares a vacunar parecieran más bien asoleaderos de animales y no recintos sanitarios.

Hoy nos lamentamos mucho del mal gobierno, pero al Presidente poco le importa eso, él solo escucha lo que su espejo le refleja y que son ocurrencias del día y no actos eficientes de gobierno.

Pobre mi México lindo y sufrido….

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